Así en la parte del estudio de la Kabbalah, cada una de las vasijas que se
presenta, el individuo de saberlas vaciar, debe de saber dar para poder
recibir, si no vacía esas vasijas, entonces, no puede volver a recibir. Vamos a ver la importancia que tiene, cuando nosotros
guardamos y guardamos cosas, en donde pasan años y no las utilizamos, entramos a
una casa y abrimos el closet, hay cosas que nos dejo la abuela, que nos dejo
el tío, que tienen incluso moho, pero estamos tan atadas a ellas que no
queremos desprendernos. Cuando no dejamos espacio para la modernidad, para lo nuevo,
entonces lo viejo ocupa ese espacio, y lo mismo va ocurriendo con nuestros
sentimientos y las emociones, es muy difícil encontrar células cancerosas en el
cuerpo de un individuo, cuando la persona no ha tenido sentimientos de odio,
sentimientos donde piensa que la vida ha sido injusta, que no ha sido correcta,
va íntimamente relacionada, entonces cuando esas células degenerativas, no
entendemos su proceso, porque en el ámbito emocional, en el ámbito mental
seguimos con los closets a reventar, en donde guardamos rencores, en donde
guardamos sentimientos de venganza y el cuerpo físico lo va a reflejar .
Una
célula degenerativa, tiene la capacidad de regresar a su punto de equilibrio si
le damos oportunidad al cuerpo físico, igual como se formula, igual como se
formula un fibrosis, sin necesidad de extirpar el órgano el cuerpo lo puede
eliminar.
VSA José Michán Amiga
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